La Comadre

Les cuento que mis viejos tienen más historias que los Warren, son de campo y han visto desde eventos paranormales hasta apariciones.

Ayer contaron un par de historias una de ellas fue la de la vieja y el espejo y esta que yo titulé como "La comadre".

Listos o no, allá voy...

Esto pasó por ahí por 1967, hace exactamente 50 años atrás. Mi abuela recién llegada a puente alto y con ya 12 hijos a cuestas.

Claramente en esos tiempos no había televisión y se vivía de los trabajos de temporeros.

La recolección de frutas y vegetales, eran el principal ingreso, los hijos más grandes cuidaban a los más pequeños y apenas aprendían a leer estaban aptos para el trabajo, dejando la escuela para apoyar con los gastos de la casa.

Una tarde de invierno, precisamente un día domingo, mientras mi abuela amasaba en la cocina escuchó el trinar de un pájaro en la ventana.

Un pájaro particular, más conocido como un tuetue.

Dícese que estos pájaros son en realidad personas que adoptan esta forma, otros les llaman

directamente brujos.

Mi abuela al sentir el cantar lo identificó y medio en broma medio en serio, le dijo lo siguiente:

"Estoy haciendo pancito, y si no se quema ninguno venga a buscar".

Continuó con su labor y con el rato y al ajetreo lo olvidó.

Eran las 18:30 todos ya habían tomado once, 1 pan por persona, 14 panes justos. Ni uno más ni uno menos.

A las 21Hrs todo el mundo se preparaba para dormir, arreglando la ropa y bolsos para ir al trabajo, al terminar la noche sería lunes y de Pirque los mandaron a buscar para cosechar nueces, unos nogales en el sector de San Juan.

El día en general estuvo nublado y pasada las 21Hrs comenzaron a caer gotas.

Gotas que retumbaban en el techo de zinc como si fueran pequeñas explosiones.

De un momento a otro alguien llamo a la puerta con 3 golpes cortos, mi abuelo que estaba cerca fue y abrió.

-"Hola comadre tanto tiempo, que la trae tan tarde por acá?"

le dijo a la mujer que cruzó la puerta.

-"Hola compadre, venía a ver a la comadre, me va a creer que soñé con ella. Y bueno quería saber cómo estaba"

Mi abuelo dio un grito y mi abuela apareció, se saludaron, acto seguido se sentaron alrededor del brasero, brasero que aún contenía unas brasas naranjas que se duplicaban mientras mi abuelo las escarbaba con un fierro.

-"¿y cómo ha estado comadre?, tantos años que no la veía", le dijo mi abuela

-"Bien fíjese acá andaba cerca y aproveche de pasar"

Respondió la mujer...

-"Quiere un tecito? La verdad es lo único que nos queda, ya mañana nos salió un trabajo y podremos ir donde los turcos"

-"mmm... Si un tecito está bien"

Contestó un poco molesta

Servido el té mi abuelo y abuela se pusieron de pie.

- "Yo mientras iré a terminar de arreglar unas cosas"

Y mi abuela continuó con sus labores, mientras la comadre con la taza en mano y la mirada perdida en las brasas que ardían y parecían bailar, si no pestañeabas en un largo rato.

Mi abuelo preparaba algunos sacos y tachos que hacían más fácil la recolección de nueces, mis tíos mientras revoloteaban alrededor.

Pasó el tiempo volando y ya siendo las 22Hrs, todos los niños estaban en sus camas, mientras la comadre seguía ahí sentada inmóvil...

Mi abuelo preocupado se acercó y preguntó:

-"Comadre esta bien?, mire mañana tenemos que trabajar, necesita algo? Le pasa algo?"

-"No me puedo ir aun"

Dijo algo molesta y presionando la taza entre sus manos aun con un poco de té en su interior

-"Pasó algo? Si quiere le pido a uno de los chiquillos que la acompañe"

Le ofreció mi abuelo, al notar que algo le pasaba

-"Compadre, yo no debería decirle esto, pero yo vengo a buscar lo que se me prometió"

le dijo sin separar la mirada del brasero.

-"Pero comadre hace más de dos años que no la veíamos que cosa le prometimos?"

replicó mi abuelo medio desconcertado.

-"La comadre sabe, ella fue..."

Respondió la comadre, llevando su mirada a chocar con la de mi abuelo.

Mi abuelo entendiendo nada, fue a la pieza donde estaba ya mi abuela acostada y le preguntó:

-"Nena que hiciste? Dice que viene a buscar algo que le prometiste"

Le preguntó mi abuelo ya medio asustado, a mi abuela.

Mi abuela se puso pálida y le contó del pájaro que escuchó en el patio.

Mi abuelo sin dudarlo, con enojo y miedo, sacó la poca harina que quedaba , tomó unas brasas poniéndolas en el horno improvisado, en un tambor.

Sin decirle palabra alguna a la comadre, comenzó a amasar.

A las 12Hrs el pan estuvo listo, envolvió las 2 tortillas que salieron del último kilo de harina que quedaba en la casa y las entrego a la señora que permaneció inmóvil hasta que vio la bolsa de género con el contenido prometido...

Esta es la historia que quería compartir.

@lasultimas en Twitter

El Abuelo

Hola, bueno, voy a contar una historia que le pasó a mi primo y tengo la seguridad que es verdad porque él nunca miente y si lo hace es en broma nomás, cosa que cuando me lo contó estaba mas serio que como nunca lo habia visto.

Lo que pasa es que él me contó que una vez, cuando se fue a una casa en la playa con su abuela, su tia y un maestro que estaba haciendo una leñera o algo asi, (la casa era de su abuelo difunto) en el dia fue todo normal, pero cuando llegoó la noche y se fue a acostar solo a un pieza, empezó a sentir pasos fuertes en el pasillo y después como que alguien pasaba los dedos por la pared.

Después sintió que algo entró a la pieza donde él estaba y se apoyó en su cama.

Me contó que fue tan brígido, que en ese momento llegaba a transpirar, pero no movía ningún dedo y eso fue por mucho rato en la noche, también me dijo que no todo el tiempo la entidad estuvo en su pieza, sino que a veces salía al pasillo y hasta al patio.

Estaba tan asustado que no abrió los ojos ninguna vez en toda la noche hasta que al fin amaneció, porque él sintió que la noche era eterna.

En el desayuno vio que todos estaban callados y él pregunto si sintieron algo raro en la noche, y ahí fue cuando todos empezaron a hablar...

Su abuela y tía le contaron que sintieron lo mismo que él , ( lo del caminar en el pasillo y hacer sonar los dedos).

El maestro a su vez les dijo, que cuando estaba durmiendo, vio pasar por la ventana a un caballero (que dando las descripciones era el abuelo de mi primo).

El maestro les contó que entonces el prendió una velas y cosas así...

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Mi primo se está cambiando de casa (en el mismo terreno donde vive su abuela) y un día se tuvo que quedar solo en la que va a ser su casa.

Me dijo que en la noche de repente todos los gatos y su perro se fueron a su lado y empezó a sentir portazos y sonidos como si golpearan las ventanas.

Al otro dia le contó a su abuela y a ella le pasó lo mismo en su casa.

Sacaron por conclusión que era su abuelo.

Contáctame

Investigación Paranormal en Chile

elena.musica@gmail.com

Santiago, Chile

La Aparición

Bueno, esto es la primera vez que publico mis historias.

Ahora en la actualidad tengo 17 años, y mientras transcurre mi vida he ganado un sin número de historias, las cuales las he vivido en carne y hueso.

Una de mis primeras historias es que estando yo en la casa de mi papá, cuando tenia unos 12 años mas o menos, en unas casas mas o menos recién construidas, estaba de noche y me encontraba yo con mi hermano peleando como de costumbre, y de repente tengo la necesidad de ir al baño.

Al abrir la puerta se podría decir que a unos 10 metros atravesando la cocina se encontraba una persona mas o menos del porte de una puerta parada, vestida de negro completa y con unos ojos verdes brillosos.

En ese momento solo pude cerrar la puerta y decirle a mi hermano: "mira hay alguien en la entrada de la cocina, mira", en ese momento salgo con mi hermano a ver y en frente de nosotros, a no mas de un metro, se encontraba la misma persona en frente mirándonos, mientras nosotros traumados cerramos la puerta y comenzamos a rezar lo mas fuerte que podíamos.

En ese momento se escucharon unos ruidos y después de un tiempo salimos a ver y no habia nadie...

Después de ese incidente, a mi en mayor grado, me empezaron a suceder cosas realmente extrañas:

Me lanzaban cosas mientras dormía...

De noche, se sentaban a mi lado en la cama...

Me susurraban al oido...

Y me rascaban la cabeza...

Esta es una de mis historias.

Segunda historia:

La mano

En este mismo año, mientras escuchaba música en mi pieza, en la casa de mi mamá, de repente mientras tenia la tv prendida y música puesta, en el entretecho comenzaron a sentirse unos ruidos como si alguien estuviera allí y tratase de salir.

De pronto se sientió como si alguien saltara hacia el piso y comenzara a caminar (afuera de la pieza).

Yo tenía la puerta cerrada y la ventana con cortinas así que no se veia nada, y como estaba en el segundo piso y ahí estabn construyendo, no habia nadie más...

En ese momento se sintió como alguien comenzaba a caminar muy rápido golpeando la puerta y la ventana de mi pieza, mientras yo no podia ni siquiera apagar la música...

Después de un rato de que golpearan muy fuerte mi puerta, se sintió como subían al techo donde estaban construyendo y la "cosa" desapareció...

En ese momento mi mamá me llamó para retarme porque estaba metiendo mucho ruido...

Desde ahí comenzaron a pasarme las mismas cosas que en la casa de mi mamá, pero más fuertes, como que me tomaban de los pies, sueños horrendos en los cuales me llamaban por mi nombre muy fuerte, además de que comencé a hablar por las noches (por lo que me decía mi mamá) con alguien...

Mi mamá me contó que en la casa en la que vivo ahora (la casa de mi mama),

vivia una bruja la cual hacia abortos y brujería y que eso podria ser la razón de todo.

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Hace poco estaba con mi hermano y se vio una silueta negra en el baño, mientras nos miraba dejó marcada su mano en la pared.

Bueno eso seria todo...

(Anónimo)

¿Duendes o Fantasmas?

Hola, mi nombre es Vale.

Vivo en Santiago de Chile ,Pudahuel Sur.

Mi mejor amiga me contó que su prima, un día vivió una experiencia aterradora en su casa.

La casa tiene un pasillo, muy oscuro de noche.

Eran como las 4:30 am y Carola, la prima de mi amiga Javiera despertó de una pesadilla y se levantó.

Fue al comedor y vio a alguien igual a la Javi vestida de blanco que la llamaba y le decia "ven ven..."

La aparición rápidamente se fue a la cocina y Carola la siguió ( los papás de la Javi estaban dormidos).

Carola la miraba y de repente esta entidad abrió la puerta del patio.

Carola la siguió y el fantasma o el duende de pronto se volvió y también la miró...

Tenía los ojos horriblemente rojos y se fue hacia el fondo del patio y desapareció...

Carola se fue corriendo y entró en la casa llorando, fue a la pieza de los papás de la Javi y ella estaba allí, en la pieza de sus papis, dormida...

Saquen sus conclusiones ........

Valentina

La Niña

Esta historia es real y me ocurrió a mi, hace alrededor de 2 años, cuando manejaba mi auto en una carretera hacia el sur en Chile.

Eran alrededor de las 6 de la tarde, estaba claro aun con sol ya que era verano, cuando de pronto a orillas del camino estaba una niña joven, representaba unos 20 años vestida de jeans y zapatillas y llevaba una mochila pequeña.

Ella me hizo parar y me pidió que la lleve.

No me dijo hacia donde se dirigía y subió al auto pero se sentó en el asiento trasero.

Bueno, se notaba una niña algo tímida y no aparentaba interés por conversar.

Le manifesté que yo iba hasta el pueblo próximo y ella callaba...

Entonces no le hablé más, solo de vez en cuando la miraba por el espejo retrovisor.

Era muy bella...

Luego, al cabo de un rato, cuando me aproximaba a llegar, miro hacia atrás con la intencion de preguntarle donde se bajaría y gran sorpresa fue ver que no habia nadie...

La niña habia desaparecido....

Impactado cuento mi experiencia a personas del lugar, afirman que en ese preciso lugar en donde se subió al auto, esa mujer..había sido enterrada.

Fue una niña asesinada por su novio, descuartizada y enterrada a orillas de esa carretera...

Luego de descubierto el crimen,los asesinos fueron capturados y luego de confesos, el cuerpo de la niña aquella fue exhumado del lugar y llevado a un cementerio.

Posteriormente, nunca más he sabido, si a vuelto a aparecer en aquel lugar...

Ricardo Pardo

Mi historia trata sobre espiritismo.

(Me imagino que será lo más habitual).

El caso es que en el verano de 1996 fui al pueblo donde suelo veranear como cualquier otro año. Un día (martes) decidimos hacer espiritismo para poder comunicarnos con familiares que habían fallecido. Para ello dibujamos en un papel la tabla o-uija.

La hicimos unas tres veces, según creo recordar (en distintos papeles que posteriormente desechamos).

Al principio pensaba que la moneda la movían mis amigos. Para hacer la prueba, les pedí que me dejaran poner el dedo a mí solo.

Lo hice, y la moneda se me movía solamente poniendo mi dedo. Fue entonces cuando me empezó a entrar miedo (ya que hasta entonces me lo estaba tomando como un juego).

Dijimos que nos diera una señal a quien estuviera allí. De inmediato se movió hacia dentro y hacia fuera la puerta de la despensa, sin embargo, no había corriente, ya que estaba todo cerrado. Todos los que estábamos allí reunidos lo vimos, no sólo yo, así que ya no fue mi imaginación.

Ya estábamos todos muy intranquilos, así que le preguntamos uno por uno a ver si nos dejaba marchar. Sólo les dejo marchar a los más pequeños, que aún no habían hecho la primera comunión. El resto, nos quedamos un poco más. Ni aún pidiéndoselo por favor nos dejaba marchar, pero nos deshicimos del papel y de la moneda (como las veces anteriores) y salimos a la calle. (Cabe destacar, que las dos veces anteriores, se realizó en otra casa).

Por la tarde me despedí de unos primos míos que se fueron del pueblo. A la noche, fuimos a dormir. Yo lo hice con mi abuela (ella sabía lo que había estado haciendo) y con una cruz que encontré por la casa colgada a mi cuello.

Esa noche dormí muy mal. Tenía mucho calor, oía pasos, temblaba y sudaba. A pesar de abrir los ojos, seguía oyendo pasos y el calor no cesaba.

Al final no puede más y le dije a mi abuela que me hiciera una manzanilla. Se levantó de la cama para hacérmela y, en cuanto dio la luz de la habitación, todos los síntomas que tenía, desaparecieron. La dije que no me hiciera nada que ya se me había pasado.

El resto de la noche, la pasé con miedo, pero no se volvió a repetir nada de lo mencionado.

A la mañana siguiente, comenté lo que me había pasado con mis amigos y primos.

Saqué conclusiones y parece ser que sólo nos pasó, a los que dormimos en las casas donde se había echo espiritismo, ya que mis primos no sintieron nada y las otras personas creo recordar que tampoco (igual no les pregunté).

Posteriormente (pasado el verano), recuerdo que hacía lo mismo que aquél día, y seguía moviéndose la moneda (ya no lo hacía en el pueblo).

Lo dejé pasar y probé pasado unos meses, ya no se movía la moneda. Esta fue la última vez que lo probé.

Esto ha sido todo. Me ha encantado poder contarles mi historia.

(Anónimo)